Prueba de Reto Bronquial con Ejercicio
La Prueba de Reto Bronquial con Ejercicio evalúa cómo responden los bronquios al esfuerzo físico, detectando bronconstricción inducida por ejercicio. Durante la prueba, el paciente realiza actividad física controlada, y se mide la función pulmonar antes y después del ejercicio mediante espirometrias simples y con broncodilatador consecutivas. Una disminución significativa en la capacidad pulmonar indica hiperreactividad bronquial. Este estudio es crucial para atletas y personas que experimentan síntomas respiratorios durante el ejercicio, ayudando a ajustar tratamientos y mejorar el rendimiento y la calidad de vida.
Prueba de Desaturación y Titulación de Oxígeno
La Prueba de Desaturación y Titulación de Oxígeno mide cómo cambian los niveles de oxígeno en la sangre durante el ejercicio y ayuda a determinar si el paciente necesita oxígeno suplementario. Durante la prueba, el paciente realiza una actividad física ligera mientras se monitorean sus niveles de oxígeno y frecuencia cardíaca. Si los niveles de oxígeno disminuyen significativamente, se ajusta la cantidad de oxígeno suplementario necesario. Esta prueba es crucial para personas con enfermedades pulmonares crónicas que experimentan desaturación de oxígeno durante la actividad física.
Prueba de la Caminata de 6 Minutos
La Prueba de la Caminata de 6 Minutos evalúa la capacidad funcional. Durante la prueba, se mide la distancia que el paciente puede caminar en un tiempo fijo de 6 minutos, monitoreando también la frecuencia cardíaca y los niveles de oxígeno. Esta prueba es útil para diagnosticar y monitorear enfermedades respiratorias y cardíacas, y para evaluar la efectividad de tratamientos. Es recomendada para pacientes con enfermedades pulmonares crónicas, insuficiencia cardíaca, hipertensión pulmonar o quienes presentan dificultades para realizar actividades cotidianas.
